No
puedo dejar de caminar: Inshallah se ha perdido. Cuando se escapa, siempre
lo encuentro husmeando en las callejuelas de la medina. Hoy no aparece. He dado
ya más de siete vueltas tras mi bastón y no lo he visto. Me pregunto si mis pasos
me acercan o me alejan de él o, si después de siete vueltas más, será él quien
me busque a mí.
Imagen de Miro Slavin |
* * *
El
gato va detrás de Samir, con pasos sigilosos y almohadillados, sabiendo que
tarde o temprano volteará su cabeza buscando trazos de su sombra... deseando meter
su cabeza peluda en la bolsa que transporta... temeroso de un bastón que apunta
al centro de la Tierra.
Imagen de Miro Slavin |