viernes, 16 de mayo de 2014

INSHALLAH


No puedo dejar de caminar: Inshallah se ha perdido. Cuando se escapa, siempre lo encuentro husmeando en las callejuelas de la medina. Hoy no aparece. He dado ya más de siete vueltas tras mi bastón y no lo he visto. Me pregunto si mis pasos me acercan o me alejan de él o, si después de siete vueltas más, será él quien me busque a mí.
 
Imagen de Miro Slavin
 
* * *

El gato va detrás de Samir, con pasos sigilosos y almohadillados, sabiendo que tarde o temprano volteará su cabeza buscando trazos de su sombra... deseando meter su cabeza peluda en la bolsa que transporta... temeroso de un bastón que apunta al centro de la Tierra.

Imagen de Miro Slavin


jueves, 1 de mayo de 2014

APOCALIPSIS


Todos los mapas señalaban aquel lugar como el último. De eso no había ninguna duda. No podía estar equivocado, se repetía una y otra vez, ahora no. Y volvía a releer los apuntes donde otros habían descrito el fin del mundo como un abismo negro que engulliría a toda la raza humana, una tormenta devastadora de meteoritos, un torbellino caótico, un cataclismo destructor.

Lo que él tenía delante era un inmenso mar de calma dorada.

Lo que él dejaba atrás era un infierno de calamidad y miseria.

El fin del mundo era en efecto el principio de la vida. Por eso, y sabiéndose dueño de la verdad, se precipitó de lleno al vacío.


Fotografía de Miro Slavin